El proceso de un entierro en el mar
Un entierro en el mar suele seguir un procedimiento fijo:
- Traslado de cenizas: Tras la cremación, la ceniza se llena en una urna soluble en agua, que se disuelve en agua de forma respetuosa con el medio ambiente.
- Adiós en el agua: Los familiares que desean un entierro acompañado suben al barco con la urna. En el lugar de enterramiento se celebra una ceremonia personal, durante la cual se pronuncian palabras conmemorativas, se esparcen flores o se escucha música.
- Entierro de la urna: La urna cae al agua y se hunde lentamente hasta el fondo. La ubicación suele estar marcada en un mapa para que los familiares puedan visitar este lugar más adelante.
La ceremonia en el agua
El entierro generalmente se lleva a cabo con un barco fletado por la compañía naviera. Tan pronto como se llega al lugar de enterramiento, el barco se detiene y los familiares se reúnen para la ceremonia de despedida. Tras un discurso conmemorativo y varias campanadas, se coloca la bandera a media asta y se lanza la urna al agua. Los familiares suelen tener la opción de añadir flores o piedras pintadas. Tras el entierro, el barco da la vuelta al lugar del entierro durante unas vueltas antes de regresar. Se puede servir café y tarta en el camino de regreso.
¿Qué pasa si hace mal tiempo?
El clima se controla de cerca con antelación para que la ceremonia pueda llevarse a cabo en condiciones adecuadas y seguras.
¿Es necesaria la participación en el entierro en el mar?
No, los familiares pueden decidir si quieren asistir al funeral. En cualquier caso, se respeta el deseo del fallecido y la ceremonia también puede celebrarse sin la presencia de la familia.
recuerdo
Tras el funeral, los familiares reciben una tarjeta con las coordenadas del lugar de enterramiento. Más tarde, muchas familias utilizan este lugar para realizar viajes conmemorativos o para esparcir flores en el agua. Algunas compañías navieras ofrecen viajes conmemorativos regulares, durante los cuales se pueden visitar los lugares de enterramiento.